El lugar de trabajo, es uno de los espacios donde más tiempo dedican las personas durante el día, jugando un papel importante en la salud de las personas.
Para rendir adecuadamente en las labores diarias, considerarse diferentes factores que inciden directamente en la salud. Individualmente, debemos ser responsables con nuestros hábitos como una alimentación saludable o realizar ejercicio; laboralmente, el espacio de trabajo o el ambiente con otras personas deberá ser evaluado constantemente para el bienestar de todos.
La promoción de la salud en el trabajo, es ofrecer a las personas, a través de diferentes acciones, los medios necesarios para poder realizar su trabajo de mejor manera. De esta forma, se construye de forma integral, una organización saludable.
Hay tres elementos que funcionan de manera integrada para lograrlo:
- Ambiente material: facilitar herramientas para trabajar eficazmente (mobiliario, maquinaria, zonas de servicio, ventilación);
- Ambiente psicosocial: convivencia y relación entre trabajadores en el espacio y tiempo de trabajo.
- Imagen Corporativa: una institución con reconocimiento ante el público, que ofrece buenas condiciones de trabajo, contribuyen al desarrollo, identificación y autoestima de los trabajadores.
Una empresa saludable es aquella que ofrece condiciones positivas para un mejor resultado, esto puede aplicarse en pequeños negocios como en grandes corporaciones. Una buena alimentación, descanso y ejercicio son acciones que deben realizarse en casa para poder rendir mejor en todas las áreas de la vida.
Debe comprenderse que la salud es más amplia que el concepto de “no estar enfermo”, sino se construye a partir de un bienestar general, por lo que actualmente, la “salud laboral” debe ser atendida por ambas partes.
Fotografías: Burst / S. Xingfu